Es la combinación de múltiples técnicas estéticas en diversas sesiones que permiten la eliminación de la celulitis, moldean la figura, mejoran el aspecto de la piel y devuelven al paciente el confort anhelado.
La celulitis es una condición común que ocasiona acumulación de grasa, bultos y hoyuelos en la piel. Afecta principalmente a las mujeres. Y es conocida también como piel de naranja.
Las zonas más afectadas por la celulitis son:
La celulitis ocurre cuando la grasa que se encuentra debajo de la piel sobresale. Esto sucede debido a que las células grasas se acumulan entre el tejido que conecta la superficie de la piel y la capa de grasa.
No se ha encontrado la causa específica por la que esto ocurre. Pero se identifican ciertos factores que aumentan la probabilidad de tener celulitis como:
Esto se debe a que las células grasas se acumulan y se empujan contra la piel.
Dentro del tejido entre la piel y la grasa existen unos cordones largos que tiran hacia abajo cuando se acumulan las células grasas. Así la superficie adquiere una forma irregular con hoyuelos.
No se conoce la razón exacta. Sin embargo se sabe que en las mujeres el tejido entre la piel y la grasa está constituido verticalmente. A diferencia de los hombres donde el tejido está entrecruzado. Esto puede explicar por qué las mujeres son más propensas que los hombres.
Otra razón es que las mujeres tienden a acumular grasa en la parte inferior del cuerpo. Los hombres por otra parte lo hacen en la parte superior.
La celulitis se divide por grados o niveles de intensidad en los que afecta la piel.
No existe una cura para la celulitis. Pero se puede reducir notablemente su apariencia por medio de tratamientos estéticos.
Existen diferentes procedimientos para combatir y decir adiós a la celulitis. Esto gracias a que acaban con acúmulos de grasa localizados y con la flacidez.
Disponemos de las técnicas más innovadoras para difuminar o eliminar la celulitis. Entre las técnicas están:
El tratamiento consiste en la ruptura de los enlaces grasos devolviendo a la zona la tersura, uniformidad y provoca un efecto tensor. El seguimiento es semanal, quincenal y mensual, con un contacto directo con los pacientes para una mejor adherencia al tratamiento, los resultados son visibles desde la primera sesión.
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